Las llaves

me hablo a mí misma:
yo te diría que en vez de buscar 
tus llaves en todos los bolsillos disponibles, 
porque es obvio que las perdiste
de tanto abrir y cerrar tu cartera
derribes la puerta con tu pequeña fuerza de mujer, 
no hay que pensar yo si pateo me quiebro
porque quizás una patada infalible
te permita entrar y se acabó el asunto.
ciertas palabras de aliento se agradecen, 
ciertos pudores se ponen de moda.
el reloj insiste, la muñeca también,
suspendo la búsqueda del llavero
me escuché a mí misma
y ahora estoy a punto de patear la puerta de mi propio departamento
siendo mujer albergo fuerza de mujer para hacerle frente a un penal bien duro
no sé de qué material está hecha mi puerta pero es bien dura
Qué suerte que no es una Pentágono, pero es jodida igual
hay gente que no la pares porque se va a sentar
hay gente que no la sientes porque se va a parar
hay gente que no la pares ni la sientes, porque esa va a flotar
yo voy a flotar de dolor cuando patee para lograr acceso a mi casa 
después de un día de trabajo
quiero aprenderme de memoria una ley cualquiera
para recitarla con aliento a mojito
en un cumpleaños.
¿qué tan mal es hacerme la graciosa?
relampaguea y yo sigo en el mar
¿qué tan irresponsable es eso?
todos se pararon y yo sigo sentada en el vagón
de la formación que está por entrar a reparación
arreglar el tren con uno adentro
la  fantasía de unos cuantos
el final del recorrido a veces no te lo avisan
el final del recorrido a veces es un beso de alguien sin cara
uno no se lleva muy bien con el final del recorrido
porque enterarse del fin te deshace
la opción deshacer
es superadora
del copy y del paste,
perdí mis llaves y no hice más copys 
por eso estoy a punto de patear la puerta de mi casa
estoy esperando que todos los vecinos se vayan
se qué me voy a hacer mierda la pierna
cuando me convierta en karateca 
mientras tanto ya me sueño dentro de mi hogar
en ese sueño
yo llego, 
saco la basura sin haber usado tanto, sin  haber tirado mucho
y ceno alguna porquería recalentada
sin dejar de mirar la luna
porque yo puedo hacer eso, sí,
yo no soy como otros que cenan
sin dejar de mirar la compu para revisar los mails
yo ceno sin dejar de mirar la luna,
si esa noche apareció, claro está.