Mi ciudad por una ventana.

"A veces cuando necesitamos ayuda nos encontramos con personas que son como un búho: nos miran, no hacen nada;
o sí, algo hacen: se nos quedan mirando"

puedo disgustarme
puedo no estar 
de acuerdo
con el fuego;
pero lo que sí
es cierto es que
del calor
se alejan
algunos
y otros
usan el fuego
para decorar
su presente
o poner más lindo
su living.

doy mi ciudad
por una ventana
que al asomar
la mitad de mi cuerpo
me permita
gritar auxilio
se incendia
mi casa.

doy mi auxilio
por una ventana
para que unos hombres
rompan mi puerta
y me salven la vida.

en planta baja
se escucha
un bombero decir a otro
<<para qué, decime para qué
 tirarle agua
si se quema un solo
cuerpo,
allí no vive más 
que ella,
guardá la manguera,
servime un vasito de agua
que acá no vamos a apagar nada,
un último favor
carbonicemos esta conversación,
y al subir al camión
cuando los muchachos nos pregunten
que qué paso por qué nos estamos yendo
digamos algo así
como que en este oficio
hay fuegos más importantes que otros
y el que quiere más explicaciones
que las vaya a pedir a otro lado>>

el camión rojo se aleja, me subo al humo,
abondono el grito de ayuda,
inhalo la maldad del bombero
pionero del acto egoísta
al no querer  enfriar mi destino,
mientras pienso 
que quizás mientras vivía
me tuve que haber ubicado
que quizás que me salvaran de esta 
niebla, caliente, naranja y negra
era mucho, demasiado pedir.