La idea

Premura en el acercamiento amoroso, 
sutilezas devoradas por mis manos
que llegan a un muro
y saltan a otro.

Si es el invierno el que pide 
un tejido de besos,
alistémonos,
acondicionemos 
las bocas,
humectemos 
el sentimiento 
que el frío avanza 
y es el nuevo carnívoro 
que no gusta de sopas.

No discutamos 
si esto es cuello y aquello lana,
quiero traer de vuelta esa temperatura 
que siempre me gustó para hacer cosas,
la temperatura 
de la que siempre
te hablé.

Por cada ingrata noticia,
quiero 
un abrazo fulminante, 
una caricia consensuada, 
en mi sillón.

Nadie necesita más abrigo que otro
somos parte de un mismo frío,
iguales hasta para temblar. 

La idea es suplir 
la congelada porción de mi cama 
en esta cadena de amaneceres 
duros que se vienen.

La idea
te incluye.

Cómo hacerte saber 
que la idea te incluye?
Cómo reclutarte? 
Cómo invitarte a pasar?
Forcejear no está bien.
Olvidé los modos.

Estoy clavada en un gesto hace tiempo
Simplemente pensando 
qué haré, 
porque, ya lo dije,
los modos olvidé.